¿Conoces la Leyenda de los “Dos Fríos”? Aquí te la contamos

Querétaro está repleto de leyendas urbanas, las cuales conservan cierto misticismo en la ciudad. La leyenda de los “Dos Fríos” es una de ellas y aquí te la contamos.

Se dice que una noche fría, el Marqués Rodolfo de Villa brindó una fiesta para la alta sociedad, con grandes banquetes, pues no solía escatimar. Mientras los adinerados de la época disfrutaban del gran festín y de la celebración, la pobreza reinaba entre los pobladores.

Se dice que ésta era una de las noches más frías en años, por lo que un vagabundo que solía dormir en lo que ahora se conoce como Plaza de Armas, decidió ir a pedir un poco de comida y cobijo para esa noche a la gran mansión.

Al llegar, el Marqués Rodolfo de Villa, se burló de él y envió a sus guardias de seguridad a sacarlo de su residencia, a lo que el pobre y hambriento vagabundo le expresó sumergido en llanto y enojo: ¡tu que me condenas a morir de Frío y yo te condeno a lo mismo! ¡podrás quitarte con abrigos el frío de tu piel pero nunca el frió de tu alma¡. Por su puesto, el Marqués se rió de sus palabras, pues lo consideró loco y volvió para seguir disfrutando del festín.

Cuando la fiesta terminó y sus invitados se fueron, el Marqués comenzó a sentir mucho frío, un frío más allá del soportable, por lo que sus esclavos lo cobijaron, sin embargo, el intento fue en vano, pues por más cobertores que le pusieron encima murió de frío en el alma. 

Lo curioso, es que esa misma noche, poco antes de que el adinerado hombre muriera, el vagabundo también había perdido la vida a causa del frío de la noche y por no tener qué comer.