Científicos logran avance prometedor en el tratamiento de la diabetes
Científicos de Weill Cornell Medicine en Estados Unidos lograron un avance prometedor en el tratamiento de la diabetes al reprogramar células del estómago humano para secretar insulina.
En un estudio con ratones diabéticos, las células reprogramadas se comportaron de manera similar a las células beta pancreáticas, respondiendo a los niveles de glucosa y manteniendo estables los niveles de azúcar en la sangre. Este enfoque ofrece esperanzas para futuras terapias en humanos.
El estudio utilizó células madre del tejido estomacal humano, convirtiéndolas en células beta pancreáticas secretoras de insulina con alta eficiencia. Estas células se cultivaron en grupos que formaron un tejido similar a un órgano y demostraron ser sensibles a la glucosa, produciendo insulina en respuesta a los niveles altos de azúcar. Los trasplantes de estos tejidos en ratones diabéticos funcionaron durante todo el experimento de seis meses, lo que indica una buena durabilidad.
La diabetes tipo 1, causada por un ataque autoinmune a las células beta del páncreas, afecta a aproximadamente 1,6 millones de estadounidenses, mientras que varios millones sufren de diabetes tipo 2 grave debido a la falta de células beta suficientes. Los tratamientos actuales presentan limitaciones y afectan la calidad de vida de los pacientes.
El equipo de investigación considera este estudio como una base sólida para el desarrollo de tratamientos personalizados basados en las propias células de los pacientes para la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2 grave. Las células beta pancreáticas tienen la ventaja de regular automáticamente los niveles de azúcar y secretar la cantidad necesaria de insulina. El trasplante de células madre gástricas modificadas podría solucionar los problemas actuales y evitar el rechazo del trasplante.
Aunque este avance muestra un gran potencial, se requieren mejoras y optimizaciones antes de que pueda ser utilizado en la práctica clínica. Se necesita aumentar la producción a gran escala de células beta para su trasplante en humanos, así como hacer que las células transformadas sean menos vulnerables al ataque autoinmune. A pesar de estos desafíos, este estudio marca un importante paso hacia nuevas terapias para abordar la diabetes de manera más efectiva y mejorar la calidad de vida de los pacientes.