La canción más antigua del mundo desenterrada después de siglos
El descubrimiento de varias tablillas de arcilla en la década de 1950 en la antigua ciudad siria de Ugarit reveló una canción que se considera la más antigua jamás encontrada. Estas tablillas, que datan del siglo XIV a.C., contienen signos cuneiformes en hurriano y pertenecen a un himno de culto de hace 3400 años.
Lo más notable de esta pieza musical es que utiliza una escala diatónica de 7 notas y presenta una armonía, contradiciendo la creencia de algunos musicólogos de que la armonía no existía en tiempos antiguos y de que la escala era tan antigua como los antiguos griegos. Este hallazgo revolucionó nuestra comprensión del origen de la música occidental y puso fin a cualquier debate académico al respecto.
La tablilla en cuestión contiene instrucciones y afinaciones para un himno dedicado a Lipit-Ishtar, un antiguo gobernante, pero los historiadores lo conocen como «Hurrian Hymn No.6». Esta oda en cuneiforme fue compuesta por los antiguos hurrianos en honor a la diosa Nikkal alrededor del siglo XIV a.C.
Aunque esta canción se considera la melodía más antigua del mundo, la composición musical más antigua y completamente conservada es el «Epitafio Seikilos», una canción griega encontrada en una columna de mármol en la tumba de una mujer en Turquía. La inscripción en la columna dice: «Soy una lápida, una imagen». «Seikilos me dejó aquí como un signo de recuerdo inmortal». La columna incluye una notación musical y un conjunto de letras que transmiten un mensaje sobre la fugacidad de la vida.
Aunque ha habido numerosos intentos de descifrar y reproducir el «Hurrian Hymn No.6», no se ha logrado una traducción completa debido a la dificultad de interpretar las antiguas tablillas. Por lo tanto, no hay una versión definitiva de la canción más antigua del mundo.
Estos descubrimientos musicales nos demuestran que la historia de la música es tan antigua como la humanidad misma. Además de estas canciones, también se han encontrado flautas primitivas hechas de hueso y marfil que datan de hace 43,000 años, lo que demuestra la presencia de la música en las culturas antiguas. Sin embargo, las canciones mencionadas anteriormente son las únicas composiciones musicales específicas de la antigüedad que se han preservado hasta nuestros días.