Las Ardillitas de Lalo Guerrero: parte de la tradición Musical Mexicana en esta época del año
Las celebraciones decembrinas y de principios de año en México no estarían completas sin las canciones alegres y entrañables de las ardillitas Pánfilo, Demetrio y Anacleto. Estos tres traviesos hermanos, popularizados por el compositor Lalo Guerrero, han sido una parte querida de la tradición musical mexicana desde los años 50 hasta la actualidad.
Pánfilo, el más juguetón de los tres, siempre se destacó junto a sus hermanos, Demetrio y Anacleto, quienes solían ser más tranquilos que él. Sus travesuras siempre estuvieron acompañadas por la presencia del profesor don Octavio, personaje al que Lalo Guerrero dio vida a través de su voz y creatividad.
Temas como «Feliz Navidad», «La Tamalada» y «Los Dientes de Pánfilo» han animado las fiestas decembrinas, siendo parte integral de la tradición musical mexicana. Aunque sorprendentemente, Pánfilo y las ardillas tienen sus raíces en Estados Unidos.
Nacidas en 1958 en Estados Unidos, las ardillas narraban historias encantadoras con un toque mexicano, reflejando la identidad chicana de su creador. Las Ardillitas urgieron de manera accidental durante una grabación en México, pues un ingeniero de audio modificó la voz de Lalo Guerrero, creando el tono agudo y tierno que caracterizaría a las ardillas.
Estos personajes agregaron elementos mexicanos y tradiciones, especialmente relacionadas con las festividades decembrinas, enriqueciendo el panorama musical bicultural. Lalo Guerrero, conocido como el ‘Padre de la música chicana’, nació en Tucson, Arizona, en 1916, y a lo largo de su carrera dejó un legado de más de 700 canciones, siendo pionero en la música bilingüe y una figura destacada en la cultura.
Su contribución a la música latina no pasó desapercibida: fue reconocido como Tesoro Nacional del folk por el Instituto Smithsoniano y recibió la Medalla Nacional de las Artes de manos de Bill Clinton en 1996. Guerrero falleció en 2005 a los 88 años, dejando tras de sí un legado musical que continúa siendo apreciado por generaciones.