De poeta a asesino, la historia de José Luis Calva Zepeda
- Por Alessandra Vázquez
Mejor conocido como “el poeta caníbal” o “el caníbal de la Guerrero”, José Luis Calva Zepeda, autoproclamado escritor, poeta y dramaturgo, es recordado hasta la fecha como uno de los asesinos mexicanos más aterradores de la CDMX.
Nacido el 20 de junio de 1969, José Luis tuvo una infancia traumática, luego de que su padre falleciera cuando este tenía apenas dos años de edad, su madre comenzó a salir con varios hombres a los cuales tuvo que llamar “papá”.
Con apenas 7 años, fue violado por un adolescente de 16 años que estudiaba en una academia militarizada, a quien identificó como Tirso, el cual era un amigo de su hermano mayor.
Tiempo después, cumplidos los 12 años, fue expulsado de su casa; donde también sufría cierta violencia por su madre. Para sobrevivir, empezó a cuidar coches y después consiguió una caja para bolear zapatos.
Esto lo convirtió en un niño callejero, hasta unos vecinos le prestaron un cuarto en la azotea del mismo edificio donde vivía. Cuando fue arrestado, este confesó que desde ahí espiaba a su madre y a sus cinco hermanos.
En 2007, elementos de la Policía Federal, llegaron al domicilio de Calva Zepeda para arrestarlo; esto por ser el principal sospechoso de la desaparición de su entonces pareja, Alejandra Galeana, quien había sido vista por última vez con vida el 6 de octubre.
Los medios nacionales e internaciones informaron que dentro del departamento 17, hogar de José Luis, habían sido encontrados restos humanos en un plato, por lo que se creyó que también cometió canibalismo, sin embargo él negó ser caníbal, aunque confesó que efectivamente había matado a su novia.
Unos meses después de entrar a prisión, en diciembre de 2007, Calva Zepeda se suicidó, ahorcándose con un cinturón. Antes de morir, este escribió su propia historia y la tituló “Instintos Caníbales”.