Detectan por primera vez vapor de agua en Ganímedes, luna de Júpiter.

Ganímedes, el satélite más grande de Júpiter y el único con su propio campo magnético, al parecer tiene vapor de agua en su atmósfera, lo cual es resultado del escape térmico del vapor de agua de su superficie helada, según las primeras evidencias halladas por el telescopio espacial Hubble.

Dicen que donde hay agua podría haber vida tal y como la conocemos e identificarla en otros planetas es muy importante en la búsqueda de planetas habitables más allá de la Tierra.

En 2015, el Telescopio Espacial Hubble de la NASA encontró “la mejor evidencia” hasta la fecha para un océano subterráneo de agua salada en Ganímedes. Se cree que el océano subterráneo tiene más agua que toda el agua de la superficie de la Tierra, sin embargo, las temperaturas allí son tan frías que el agua en la superficie es sólida congelada. El océano de Ganímedes residiría aproximadamente 160 km por debajo de la corteza

Ahora, reexaminando observaciones que hizo el telescopio en las dos últimas décadas, astrónomos han descubierto evidencia de vapor de agua en su atmósfera. Este se formaría cuando el hielo de la superficie de la luna se sublima,es decir,pasa de sólido a gas.

A bordo del Hubble hay varios espectrógrafos, instrumentos que dividen la luz en longitudes de onda individuales. Uno de esos instrumentos es el espectrógrafo de imágenes, que funciona en longitudes de onda que van desde el infrarrojo cercano hasta el ultravioleta. En 1998, este tomó las primeras imágenes ultravioleta de Ganímedes y estas revelaron patrones en la atmósfera. Esos patrones resultaron ser bandas aurorales y proporcionaron a los científicos evidencia de que Ganímedes tiene un campo magnético permanente.

Los científicos compararon las imágenes de las auroras de Ganímedes con las auroras observadas aquí en la Tierra, y aunque eran similares, también había diferencias. Las similitudes entre las dos observaciones ultravioleta se explicaron por la presencia de oxígeno molecular, O2. Las diferencias se explicaron en ese momento por la presencia de oxígeno atómico, O.

Con la misión Juno, de la NASA, se intentó tomar nuevas imágenes en un intento de medir cuánto oxígeno atómico hay en su atmósfera. Y lo que descubrieron es que no había realmente oxígeno atómico en la atmósfera. Vieron que debido a que la temperatura de la superficie de Ganímedes varía mucho a lo largo del día, alrededor del mediodía,las temperaturas pueden ser lo suficientemente cálidas cerca del ecuador como para que las pequeñas cantidades de hielo de agua se sublimen en vapor de agua

Y las diferencias entre los dos conjuntos de imágenes proporcionaron la correlación entre las auroras y el lugar donde se esperaría el vapor de agua. (Cámara del lado oculto de Ganímedes de 1998 por la sonda Galileo. Los colores se han mejorado NASA.

Estos hallazgos sugieren que el vapor de agua realmente existe en las atmósferas de los cuerpos helados en el sistema solar exterior. No descartan encontrarlo en más lugares.

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