El confinamiento evidencia la violencia doméstica contra las mujeres
La pandemia por COVID-19 evidenció la violencia que sufren las mujeres como el trabajo de cuidados no remunerados, la doble y triple jornada
Redacción
Durante la videoconferencia de prensa para presentar el informe mensual del Grupo Interinstitucional de Estrategias contra las Violencias de Género, Sánchez Cordero señaló que es un momento adecuado para que la sociedad y el Estado repiensen la igualdad en la redistribución del trabajo en el hogar.
No solamente estamos hablando de la redistribución de la riqueza o del ingreso, ahora debemos enfocar también en la redistribución del trabajo. El trabajo doméstico y de cuidado son actividades básicas en la vida, que deben ser redistribuidas entre todas las personas que integran las familias”, subrayó.
Asimismo, dijo que se deben reconocer que estas labores sostienen al mundo productivo, al que genera recursos económicos.
Con el confinamiento -añadió Sánchez Cordero- es el momento de dialogar y redistribuir el trabajo doméstico y de cuidados en forma igualitaria, equilibrar estas labores y de permitir que las niñas y las mujeres tengan tiempo de desarrollarse en otros ámbitos de la vida que por mucho tiempo les han sido vedados, les han estado prohibidos.
También es el momento de decir no a la violencia contra las niñas, niños y adolescentes, contra las mujeres, contra las personas con discapacidad, pero también contra las personas de la diversidad sexual y las personas adultas mayores. Es un tiempo de reafirmar los derechos, más que limitarlos”, expresó.