La fuente de los ahorcados de Querétaro
México es un país muy rico en historias y cultura, algo de lo que nos hace mexicanos son las leyendas y mitos que surgen a raíz de historias que nos contaban nuestros padre o abuelos, en Querétaro no es excepción y por supuesto que hay historias que vale la pena seguir contando como lo es la de la famosa “Fuente de los Ahorcados”.
Fue durante la época de la independencia de nuestro país cuando se comenzó a utilizar esta fuente, que se encontraba a unos cuantos metros del cuadro principal de la ciudad de Querétaro, para darle fin a la vida de las personas que eran declaradas como traidoras.
Y este lugar conecta principalmente con otro muy emblemático, la cárcel, que también es conocida como la Casa de la Corregidora, Josefa Ortiz de Dominguez -pero eso es historia para otro post- pero es que era justamente al oeste de esta prisión de donde se sacaba a los internos para que caminaran por la calle Pasteur y llegaran la vía “Del Descanso”, la cual conforman Reforma y Zaragoza.
Y es que si eras un preso y te sacaban de la prisión para realizar este recorrido por las calles del centro de la ciudad era seguro que tu vida estaba por terminar en esta fuente; al llegar al lugar debían hacer fila y esperar su momento, puesto que además se realizaba una ceremonia que solían hacer durante las guerras de aquel siglo XIX.
Frente a la Alameda Hidalgo, esta fuente de colores crema y naranja alberga la muerte de diferentes tipos de criminales, como homicidas, bandoleros, ladrones de caballos, traidores a la patria -o lo que la gente de aquella época consideraba traición-, hoy más de 200 años después la gente aún cuenta historias sobre este lugar, por lo que se persignan y bendicen al pasar por ahí.
Este tipo de historias son las que si bien no son de un reconocimiento bueno o un orgullo nacional, es parte lo que conforma al estado y merece la pena el mantener viva la leyenda de las personas que pasaron por ahí, los hechos que sucedieron en este lugar por el que día a día transitan miles de personas.