Las canciones que Juan Gabriel cantó en Japonés
En una inusual y poco conocida faceta de la carrera de Juan Gabriel, el icónico cantautor mexicano incursionó en el mercado musical japonés con versiones en ese idioma de dos de sus grandes éxitos: «Me he quedado solo» y «No tengo dinero». Aunque el proyecto buscaba expandir la presencia del Divo de Juárez en el mercado asiático, las versiones en japonés no alcanzaron el éxito esperado.
A finales de los años setenta y principios de los ochenta, la disquera BMG Ariola ideó un plan para proyectar a artistas mexicanos en el extranjero, entre ellos José José y Juan Gabriel. Este último fue seleccionado para llegar al mercado europeo con la reedición de «My Home Town» a dúo con Paul Anka y dos de sus canciones en otros idiomas. «Me he quedado solo» y «No tengo dinero» fueron elegidas por su éxito en ingresos y se grabaron en inglés, portugués y japonés.
El periodista musical Antonio Carrizosa sugiere que el proyecto buscaba convertir a Juan Gabriel en el ídolo más grande de Japón. Sin embargo, el experimento no tuvo el éxito planeado. Aunque las versiones en japonés fueron grabadas con precisión fonética comprensible, Juan Gabriel pudo haber rechazado la promoción en Japón debido a sus estándares exigentes.
El productor Eduardo Magallanes, quien trabajó con Juan Gabriel por más de 40 años, y Jorge Ávila, coordinador de marketing estratégico de Sony, desconocen las razones precisas del fracaso del proyecto. Solo se grabaron dos canciones en japonés, y el disco completo nunca vio la luz.
A pesar de este tropiezo, la música mexicana ha tenido éxito en Japón, como evidencia el trío de boleros Los Panchos. Años después, Juan Gabriel incluyó las versiones en japonés en un álbum de rarezas para conmemorar sus 25 años de carrera, demostrando su constante interés por explorar nuevas culturas.
Aunque se anunció una gira japonesa en 2013 con conciertos que incluirían temas en japonés, no hay evidencia de que estos eventos hayan tenido lugar. El motivo de la cancelación no se aclaró públicamente. A pesar de estos contratiempos, la música de Juan Gabriel sigue siendo universal, trascendiendo fronteras y dejando un legado que perdura en el tiempo.