María Ángela se ausentó voluntariamente, no fue víctima de ningún delito: Fiscalía
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, aseguró que María Ángela Olguín Bustamante, quien desapareció en el paradero de Indios Verdes, se ausentó voluntariamente y no fue llevada a la fuerza por un hombre, como se señaló en un principio.
De acuerdo con el vocero de la Fiscalía, Ulises Lara, la joven se refugió en un campamento de un colectivo de mujeres, ubicado en el Centro de la Ciudad de México, y una de sus integrantes le dio asilo por unos días en un domicilio de Nezahualcóyotl, Estado de México, municipio donde fue localizada días después.
“Luego de un exhaustiva investigación a cargo de la Fiscalía fue posible establecer que la ausencia de la menor adolescente fue voluntaria y no fue víctima de algún delito durante el tiempo que permaneció ausente”.
Explicó que esa fue la conclusión de la investigación que realizó la dependencia, en la cual se incluyó el análisis de imágenes obtenidas por cámaras públicas y privadas, información de redes sociales, así como entrevistas, dictámenes periciales y recorridos en campo.
Derivado de ello, el funcionario hizo una cronología desde el momento en que se reportó la ausencia de la menor, en el Centro Transferencia Modal (Setram) Indios Verdes, del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.
Recordó que la madre de la menor denunció la ausencia de la menor el 19 de enero, y que de acuerdo con el relato inicial, la mamá acudió a un sanitario en el Cetram Indios Verdes, el funcionario señaló que su hija aguardó en el exterior y posteriormente escuchó su voz. Sin embargo, al salir ya no la vio, por lo que de inmediato solicitó auxilio de la policía para localizarla.
De acuerdo con el vocero, en una secuencia de videos se ve como la adolescente arriba al campamento de un colectivo ubicado en inmediaciones del Palacio de Bellas Artes. Ahí, como lo señalaron en su entrevista, le brindaron apoyo al pensar que se trataba de una persona perdida, pidió asilo y se le fue brindado en un domicilio ubicado en la colonia Juárez Pantitlán, en Nezahualcóyotl, Estado de México.
“Al día siguiente 20 de enero volvieron al campamento ubicado en la zona de la Alameda Central, donde la adolescente permaneció la mayor parte del día y realizó algunos desplazamientos por inmediaciones del lugar”,
Luego de esto, Ángela se trasladó junto a una integrante del grupo al domicilio del Estado de México, donde pasó la noche e incluso se le facilitó ropa. El 21 de enero regresan al campamento, más tarde las testigos, como se señala en sus declaraciones ministeriales, se percataron que se trataba de una joven ausente que era buscada por redes sociales, por lo que entablaron contacto con la Comisión de Búsqueda de Personas de la capital, para referir lo ocurrido.
La menor, al darse cuenta que dichas personas ya tenían conocimiento de su identidad, esta dijo que acudiría a la zona de fuentes de la Alameda, y al buscarla ya no la encontraron.
“Horas más tarde una de las integrantes del Colectivo recibió un mensaje de un teléfono celular desconocido, en el que la menor le informaba que se encontraba bien”. Para lo anterior, la menor pidió un teléfono prestado.
Señaló que tras la localización de la menor y con base en revisiones médicas, psicológicas, y periciales, “puede establecerse plenamente, con elementos contundentes, que la menor no presentaba ningún daño y que su ausencia no tuvo relación alguna con la comisión de algún delito”.
Asimismo, reiteró que la FGJ-CDMX no tiene documentado ningún caso en el que alguna niña, adolescente, o mujer haya sido privada de su libertad en esta zona, y no se cuenta con registro de ilícitos de este tipo en inmediaciones del Centro de Transferencia Modal de Indios verdes o zonas aledañas.
Cabe recordar que Ángela fue encontrada en una bolsa negra, atada de manos y pies con cinta y agujetas.