La Secretaría de Salud recuerda a los papás la importancia del autocuidado de la salud
La Secretaría de Salud del estado de Querétaro felicita a los papás que viven en la entidad y los exhorta a que cuiden su salud con hábitos saludables como la actividad física y una alimentación adecuada.
También los exhorta a efectuarse las revisiones médicas de forma periódica para obtener diagnósticos tempranos y tratamientos oportunos que les permitan una buena calidad de vida.
Por la presencia de la contingencia sanitaria causada por el virus SARS-COV2, 2020 fue un año atípico. En Querétaro, las cinco primeras causas de morbilidad en el hombre fueron las infecciones respiratorias agudas, la enfermedad COVID-19, seguidas por las infecciones intestinales, infecciones de vías urinarias y conjuntivitis; este comportamiento fue similar en todo el país.
Las infecciones respiratorias agudas forman parte de un grupo de enfermedades que se producen en el aparato respiratorio, causadas por diferentes microrganismos (virus y bacterias).
La mayoría de esas infecciones, como el resfriado, son leves, pero dependiendo del estado general de las personas pueden complicarse y llegar a amenazar la vida, como es el caso de las neumonías y de COVID-19.
Para evitarlas, es necesario seguir algunas recomendaciones como:
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.
- Evitar el contacto cercano con personas enfermas.
- Quedarse en casa ante sospecha de enfermedad.
- Cubrirse la nariz y la boca con un pañuelo desechable al toser o estornudar y luego tirarlo adecuadamente.
- Usar cubreboca cuando sea difícil mantener el distanciamiento físico, cuando se esté en espacios cerrados y al salir de casa.
- Mantener sana distancia.
- Limpiar y desinfectar objetos y superficies que se tocan con frecuencia.
- Lavarse las manos con agua y jabón o usar un desinfectante de manos a base de alcohol a 70%.
- Vacunarse contra la influenza y contra COVID-19.
Por otro lado, las enfermedades diarreicas son infecciones del sistema digestivo ocasionadas por bacterias, virus o parásitos, cuyo principal síntoma es la diarrea; al presentarla, es importante hidratarse, acudir al médico y no automedicarse.
Para evitarlas es necesario consumir solo agua purificada hervida o clorada; lavarse las manos con agua y jabón después de ir al baño, de cambiar pañales, y antes de comer o manejar alimentos.
También lavar frutas y verduras con agua segura; consumir alimentos bien cocidos o fritos, preparados higiénicamente; mantener los alimentos bien tapados y refrigerados, ya que los microorganismos pueden ser transportados por insectos o por el polvo y se multiplican con rapidez, especialmente en épocas de calor.
Algunas acciones que se pueden tomar para prevenir las infecciones urinarias son: reducir los factores de riesgo modificables, como mantener una buena higiene de genitales, usar ropa interior de algodón, tomar bastantes líquidos (especialmente agua simple) y se recomienda la revisión de próstata a partir de los 45 años de edad.
Con el fin de evitar la quinta causa de enfermedad (conjuntivitis), se debe evitar tocar los ojos con las manos sucias; no automedicarse y acudir a la unidad de salud más cercana si se presentan síntomas como color rosado o rojo en la parte blanca del ojo, secreción de pus, picazón, irritación o ardor.
La obesidad, la hipertensión arterial sistémica y la diabetes mellitus tipo 2 son un factor de riesgo para infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares, afecciones que, desde hace décadas han figurado dentro de las primeras causas de mortalidad en el país y a nivel mundial; además de ser una causa común de discapacidad y muerte prematura.
Para mantener la salud, en general, es importante seguir estilos de vida saludables: consumir de seis a ocho vasos de agua simple potable al día; aumentar el consumo de frutas y verduras; reducir el consumo de azúcar, sal y alcohol, y evitar el tabaco.
Además se debe tener una buena higiene personal; dormir ocho horas diarias; evitar situaciones de estrés; y sobre todo, realizar actividad física a diario, ya que ayuda a prevenir sobrepeso, obesidad, diabetes mellitus, hipertensión arterial, cáncer, depresión y osteoporosis, entre otras enfermedades que afectan al hombre.