La historia de José María Benito Reynoso, un queretano valiente
En 1867, después de tres meses de vivir una crisis de agua en el estado de Querétaro, la cual había comenzado por derrocar a Maximiliano, que había hecho de la ciudad la capital del imperio.
Las tropas liberales habían tomado la decisión de cortar el suministro de agua para causar molestia en el entonces emperador, lo que evidentemente funcionó.
El suministro fue cortado cuando los soldados generaron una fuga en el segundo arco, generando que el vital líquido se tirara por todo el valle de Carretas.
Ante la situación, uno de los habitantes, llamado José María Benito Reynoso, buscó llevar agua a la población ya llevaba sufriendo mucho tiempo por la carencia de agua.
Se dice que Benito Reynoso, subía por las noches a restablecer el flujo de agua, arreglando las fugas con pencas de nopal. A pesar de que su estrategia funcionaba, el valiente queretano se exponía a recibir algún disparo por parte de las tropas repúblicanas.