Alumna de la UAQ propone ‘plantas mejoradas’, para reducir el uso de agroquímicos

Amanda Kim Rico Chávez, alumna del Doctorado en Ingeniería en Biosistema de la Facultad de Ingeniería (FI) de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), desarrolló un protocolo para brindar una opción sostenible al obtener plantas mejoradas.

Su proyecto, el cual es financiado por el Fondo de Proyectos Especiales de Rectoría (FOPER) 2021, consiste en emplear elicitores que causan “estrés positivo” en el apio, una hortaliza con alto valor nutritivo, pues -además de ser bajo en calorías- es considerado un alimento funcional, es decir, tiene propiedades que mantienen sano al sistema cardiovascular, como los antioxidantes y se han comprobado sus efectos antiproliferativos, útiles en el tratamiento del cáncer.

Esta propuesta, nace de la preocupación por reducir el uso de agroquímicos y contribuir a la salud de los consumidores. Resulta primordial aumentar las concentraciones de estos metabolitos secundarios a través de mecanismos amigables con el medio ambiente.

“Este estrés estimula los mecanismos de defensa de las plantas para obtener una variedad de respuestas favorables, en este caso, trabajamos con ácido salicílico, peróxido de hidrógeno y quitosano, que son compuestos que pueden encontrarse de manera natural en las plantas y su entorno. Es parte de una serie de proyectos que se realizan en el Campus Amazcala”

En cuanto al proceso, la universitaria señaló que “plantamos el apio y solamente le asperjamos en las hojas el estresor, en la dosis que previamente determinamos como adecuadas. Quiero subrayar que las respuestas metabólicas de las plantas son muy rápidas. Tienes una respuesta dentro de la primera hora a nivel genético y en las primeras 5 o 6 horas, ya tienes una respuesta metabólica”.

Hasta el momento, se ha obtenido incremento en las propiedades morfológicas del apio, lo que quiere decir que las plantas crecieron más en el mismo tiempo y en las mismas condiciones que las de los otros tratamientos.

El proyecto continúa en pruebas para medir parámetros de crecimiento, altura, diámetro; una vez recolectados los apios, determinarán el peso seco y fresco; posteriormente, analizarán químicamente las hojas para identificar los metabolitos dentro de las muestras y cualquier otro cambio.

Al respecto de su participación en el FOPER, destacó que los proyectos enfocados en la producción agrícola son indispensables, dado que la población no dejará de aumentar, pues fomentan métodos sostenibles. Asimismo, agradeció el apoyo y facilidades otorgadas por los Campus Amazcala y Aeropuerto, y a la Facultad de Química, así como a su asesor el Dr. Ramón Guevara González

“Necesitamos el apoyo de la Universidad para despegar proyectos de impacto social”.

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